La magia de esta pomada es que rescata las bondades de la caléndula y el geranio, y las combina con el poder regenerativo que tiene en la piel el cempasúchil, además, para este lote utilizamos un lote de cera de abeja de la Penínnsula de Yucatán altamente aromático, que se funde en un gratificante olor floral. Es importante añadir que tuvimos la oportunidad de adquirir el cempasúchil orgánico a un grupo de mujeres de nuestra región, que se dedican a la producción agroecológica de derivados de la milpa y otras flores y vegetales de temporada.
 
Definitivamente un lote que no te puede faltar en tu botiquín ¡¡
 
Caracetrísticas: Hechos solo con ingredientes naturales puros, cera de abeja orgánica de extracción artesanal, local y en muy pequeños lotes. Aceites esenciales puros.
 
Indicada en pieles sensibilizadas, quemaduras leves por el sol u otros agentes e irritaciones por picaduras ya que ayuda a relajar y regenerar la piel.
 
 
Advertencia:
Aplique una pequeña cantidad de bálsamo en el antebrazo para descartar cualquier reacción alérgica a las plantas de la mezcla.
Es mejor no emplear aceites esenciales puros en niños mayores de 3 años ni en mujeres embarazadas o lactantes.